Con aroma a café nació el sueño, un sueño regenerador, una ventana abierta a la esperanza, un acto insurrecto para resucitar de la indolencia reinante establecida comúnmente o, lo que es peor, de una pena vírica asentada en las conciencias que adormece lentamente a todo ser viviente que sabe de la palabra y el canto.

Y como de crear espacios ideales se trataba, nos pusimos a imaginar un ideario sin los límites que nuestra realidad imponía al pensamiento. Así fue cómo aparecieron miríadas de duendes haciendo sonar sus instrumentos nunca tañidos por ellos anteriormente, y el sonido que producían era mágico pues unía allí donde todo sesgaba y elevaba donde reinaba la desilusión.

Este sueño consistente en la idea de orquestar a esos seres misteriosos que convivían en barrios y saltar a la alegría de vivir fue lo que provocó que diese a luz Barrios Orquestados.

Según la investigación liderada por el neurocientífico sueco Björn Vickhoff en la Universidad de Gotemburgo, cantar juntos hace que las emociones se sintonicen: «Cantar es a menudo una expresión de una voluntad compartida»; además, «acoplar el ritmo cardiaco a una respiración lenta tiene un efecto subjetivo y biológico calmante y es beneficioso para la función cardiovascular», explica.

Cantar juntos es lo primero que llevamos a cabo en el proyecto Barrios Orquestados con alumnos y familiares. Este enfoque metodológico va de la mano de las investigaciones de Vickhoff y de las aseveraciones del pedagogo musical español Fernando Palacios, quien en el último congreso de la Red de Organizadores de Conciertos Educativos (ROCE), celebrado en Las Palmas de Gran Canaria, planteó que la mayoría de los problemas de la educación musical en España se solucionarían si en el aula se recibiese formación vocal auditiva y canto coral, lo que no solo potenciaría un aprendizaje musical significativo, sino que generaría una enorme y positiva afición.

En cada clase de Barrios Orquestados se dedica un apartado muy especial a la educación vocal y auditiva en grupo; es decir, al canto coral. Posibilitando el aprendizaje de las mismas canciones que posteriormente tendrán que interpretar con sus instrumentos, favoreciendo la interiorización de las mismas y facilitando el proceso complejo de la habilidad instrumental. Asimismo, los familiares voluntariamente acceden a una clase semanal que lleva por nombre “Sensibilización Musical”. Es aquí donde aprenden a cantar en conjunto, entre otras muchas cosas, y acompasan sus respiraciones, timbres y afinaciones contribuyendo de esta manera a la solidaridad del grupo clase y, por extensión, de su entorno social.

En Barrios Orquestados creamos regiones de aprendizaje donde los agentes sociales, centros educativos, los organizadores no gubernamentales, las empresas, los organismos públicos, etc., cooperan para solucionar problemas, procurando así una mejora del entorno dentro de su contexto urbano a un nivel socio-cultural. Tratamos que las personas o grupos trabajen y aprendan juntos con el fin de generar nuevas y mejores expectativas en su localidad, dinamizando así a todo el núcleo urbano a partir de un foco determinado de acción y, en consecuencia, provocando de esta forma una onda expansiva que alcanza incluso de aquellos sectores del organismo que no han participado directamente de la acción en su inicio. El desarrollo, por lo tanto, se convierte en un proceso colectivo en el que las organizaciones y los individuos con distintos objetivos se asocian para producir un resultado que interesa a todas las partes implicadas.

Las investigaciones muestran que una organización social cooperativa de las actividades de enseñanza y aprendizaje en el aula resulta más efectiva desde la perspectiva del rendimiento académico y del proceso de socialización de los alumnos que una organización competitiva o individualista (Colomina y Onarrubia, 2001).

En Barrios Orquestados hemos desarrollado un aprendizaje cooperativo donde cada alumno ha sido muestra y espejo, donde no solo trabajan juntos, sino que han edificado conjuntamente hacia objetivos contingentes perfectamente reconocibles.

La tutoría entre iguales ha sido otra técnica consistente en promover la conducta de ayuda entre los alumnos para aumentar el rendimiento, que ha ofrecido igualmente resultados altamente positivos, pues la menor desigualdad en las relaciones hace que los alumnos puedan expresar de forma más directa sus dudas y búsquedas.

De esta manera, a través de interacción cooperativa, los alumnos resuelven sus divergencias y favorecen la reestructuración y la puesta en común de los parámetros fundamentales para el aprendizaje y el logro de metas. Todo ello ayuda a que la motivación esté siempre en cotas elevadas, promoviendo lo relacional y afectivo en todos los discentes. Esto posibilita la integración de todos sus componentes y el desarrollo óptimo de su autoestima.

El pasado sábado 28 de junio, en el IES Lila del Valle de Jinámar, se produjo pura poesía. Aunque la mejor poesía es la que no se puede escribir, como los mejores momentos de una vida, me veo en la necesidad de reflejar en palabras lo que allí pudimos vivir los presentes. Aunque solo sea por compartir y hacer extensible mi reconocimiento a todos los que han hecho posible que Barrios Orquestados haya crecido de una manera tan orgánica y satisfactoria.

El trabajo paulatino, con un cariño extremo, con una secuenciación de contenidos bien estudiada, con una adquisición de compromisos por parte de todos y cada uno de los implicados y con la perseverancia, ha hecho que en el pasado concierto pudiésemos disfrutar de un evento singular donde comprobamos que, después de un corto pero sólido recorrido, los alumnos van adquiriendo una seguridad en el escenario inusual para el poco tiempo que llevan y una conciencia de la enorme relevancia que tiene lo que están llevando a cabo, pues, con sus canciones cantadas y tañidas, están transformando una sociedad y un tiempo.

Enhorabuena a los alumnos, a las madres y padres, a todos los familiares, a los amigos y seguidores del proyecto, a los mecenas, a los profesionales de los diferentes centros educativos donde trabajamos de manera directa o indirecta y, especialmente a todas esas entidades que a través de sus apoyos financieros y logísticos hacen posible Barrios Orquestados, a nuestros patrocinadores: Fundación Canaria Mapfre Guanarteme, Fundación DISA, Fundación Júnguel Sanjuán del grupo SATOCAN; y a nuestros  colaboradores: Fundación SGAE, Obra social «La Caixa», Fundación la Caja de Canarias, Vicerrectorado de Cultura y Atención Integral de la ULPGC, CAPISA y SAMES CANARIAS (Servicio de Atención Mixta y Emergencias Sanitarias).

Gracias muy especialmente al maravilloso equipo de BB.OO.: Andrés Betancort, Laura Brito, Eva Cabrera, Dávide Payser, Laura Iglesias, Tatiana González, Hugo Escobar, Samanta León y Pedro Santana, y a todo el equipo de profesionales que se suman eventualmente a colaborar con el proyecto, pues son definitivamente quienes ponen la rima en esta poética vivencia que podemos ver y escuchar, y que solo nos alinea con la existencia, colmándonos de esperanza y ternura.

José Brito