La experiencia compartida con 160 niños/as y jóvenes de edades comprendidas entre 7 y 17 años ha sido espectacular. El pasado 31 de julio en el Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria se pudo respirar una energía inmensurable con la que debemos ser absolutamente responsables. Es nuestro deber como docentes y como seres humanos, saciar la sed de conocimiento y vida que tiene esta nueva generación.
Enhorabuena a todo el equipo de la Asociación INEGALE y mi más sincero agradecimiento, por haberme permitido disfrutar de semejante experiencia. Un fuerte abrazo y un millón de gracias