siempre fue
tarde,
triste tarde
de muerte repetida.
Toda una vida
de nostalgia
lenta y amarga.
Cada semana
morimos un poquito
en esta tarde,
nos caemos estrepitosamente
con dolor ajeno
y con el propio
cultivado
con pertinaz labranza.
Tiene su propio sonido
y no es de fiesta,
su particular aroma
y no es a flores,
todo sabe a destiempo,
a soledad y elegía
a pena y melancolía
en esta tarde
de domingo, tarde.